Mi vida universitaria se divide en tres lugares, Puebla, Córdoba y Mazatlán. Un año en la UDLA en Puebla fue una de las oportunidades mas desaprovechadas de mi vida, por "vivir" el momento, tener como prioridades a mi coche, el nintendo y no perder ninguna ocasión de salir a divertirme, tuvo como resultado el darme de baja de la universidad y empezar otra vez en el Tec, dos años en Córdoba, bien invertidos y luego 2 años en Mazatlán, misma carrera, Hotelería y Turismo, era la mejor carrera para cumplir mi sueño, tener y operar un bar o restaurante y aquí es donde me quiero extender, de esos dos años en Sinaloa.
LM se graduó de 20 años, R de 21, yo llegaba a Mazatlán a 4 semestre a esa edad, siendo el hermano menor y teniendo esos ejemplos podía haberme sentido presionado de alguna manera pero no, no me puedo quejar de ninguno de los 2, jamás me han hecho sentir incómodo por eso, al contrario siempre me han protegido y consentido de alguna manera, a su manera claro, pero protegido y aceptado en todas las situaciones de mi vida. Estaba en el lugar que quería, lejos de Córdoba y por primera vez en mi vida, no me conocía nadie, ni una sola persona en la escuela sabia quien era o de donde venía , no era el hijo de nadie o el amigo de no se quien. Ese primer semestre mi forma de ser me impidió hacer un solo amigo, fui una isla, así solo según yo me sentía bien, platicaba lo necesario, en verdad no dejaba de hacer cosas, iba a bares, al cine o a cualquier lugar, pero siempre solo, estuvo bien un tiempo y después cuando necesitaba de alguien, mi imagen de "interesante" no me permitía entablar una conversación de mas de 2 frases, vivir solo y lejos no estaba siendo lo que esperaba, siempre decía que era increíble y que mejor no la podía estar pasando cuando desde mi casa o amigos de Córdoba me preguntaban, claro que me encontré a mi mismo hasta el final de ese semestre y decidí cambiar y ahí sí, empezó otra de las mejores épocas de mi vida.
Una vez que me abrí a la gente, conocí personas increíbles, sobre todo gente foránea que como yo llegó a estudiar ahí, con algunos de ellos jugábamos billar casi todos los días y las noches....y cuando se podía en las mañanas también, es un deporte de práctica, como todos, obviamente de habilidad pero sobre todo de práctica y como lo hacíamos muy seguido pues no éramos nada malos, sobre todo ......bueno, no quiero ofender a nadie, así lo voy a dejar, Fernando, Panchito, Felipe, el Mike y yo, a
veces todos juntos y si no con cualquier combinación dependiendo de quien pudiera, todos eran tenistas por lo que la única época de mi vida en que practiqué el tenis fue con ellos, eran como mis
veces todos juntos y si no con cualquier combinación dependiendo de quien pudiera, todos eran tenistas por lo que la única época de mi vida en que practiqué el tenis fue con ellos, eran como mis
maestros, la única vez que le gané a alguien fue a Claudia la novia del Mike que todavía me acuerdo la encabronada que se puso, la única vez que la vi enojada creo. La gente de Mazatlán es o era muy cerrada, sobre todo con la gente de fuera, por lo que entre nosotros se formó como le decíamos, la "familia foránea", de ahí salieron grandes amigos, Cindy, "mi sister", roommate del depa oficial para fiestas y reuniones ( los domingos teníamos nuestro ritual, ella limpiaba y yo hacia salsa de chorizo ), los del billar obvio, no podría mencionar a todos, claro que tuve amigos mazatlecos. En la escuela hicimos una sociedad de alumnos foráneos que no existía y para tener el control total según nosotros, me hice novio de la presidenta de la asociación de alumnos de Hotelería .Fuí locutor de radio casero "Mr P", todos los días había algo que hacer y en las noches también, había dias que llegabamos directo de jugar volley playero en algún bar a la escuela a la primera hora llenos de arena.Por supuesto que todos hacíamos algo por la escuela, organizando simposiums, eventos para recaudar fondos y todo lo clásico para salir bien con las calificaciones, teníamos prácticas profesionales todas las semanas en algún Hotel. Nunca he probado ninguna droga, ninguna, he sido rockero con pelo largo, fiestero y tenido muchísimos amigos, el
alcohol siempre ha girado en torno a reuniones y fiestas durante toda mi vida, en especial en Mazatlán, siempre he tomado con responsabilidad, nunca me tomo la "última", la que te pone mal, bueno.....si una o dos veces.... De las drogas he vivido 2 o 3 experiencias muy cercanas y he visto de primera mano como los pone cuando están en el "down", es horrible y doloroso ver el efecto que producen cuando los pone mal, yo creo que por eso nunca he intentado ni siquiera probar. Tenía mi bar de cabecera, el "No Name café", mi segunda casa. La última vez que fui allá, ya no había ni Tec ni No Name, ya esta mas bonito Mazatlán pero recorrer los lugares que frecuentaba o los departamentos donde viví es como regresar a tus orígenes, te da nostalgia claro, no es querer regresar el tiempo ni nada, cada cosa tiene su momento.
Dejar Mazatlán fue una decisión difícil pero no me arrepiento, me faltaban ocho materias para terminar y decidí tomar otro camino que me llevó a conocer a las dos personas mas increíbles de mi vida, a D y a P, mis hijos. Pero en la escuela y en la vida diaria en Mazatlán descubrí muchos secretos y teoría sobre como manejar un bar y restaurantes. Cuando regresé dos años después a la graduación de algunos amigos me di cuenta lo que había sido en realidad, la cantidad de amigos que hice y que hasta el día de hoy trato de conservar. Como dice la frase " la vida no cuenta los pasos que has dado, sino las huellas que has dejado", eso es lo importante y si al final de cada etapa de mi vida salgo sumando, la que sigue siempre será mas fácil. Gracias a todos los maestros, amigos, jefes y demás gente que conocí y espero volver a verlos, a ver si a alguien se le ocurre organizar una reunión.
En la tercera parte de esta serie escribiré sobre mi sueño....."Viento del Norte...."
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